jueves, 29 de enero de 2009

proyecto NUEVOS CANTOS PARA MÚSICAS NUEVAS: norte de Chile


OBJETIVO GENERAL

Realizar una itinerancia por las regiones de Antofagasta y Arica de Conciertos de música clásica para voz (soprano) y piano de compositores chilenos del siglo XX en conciertos gratuitos. OBJETIVOS ESPECÍFICOS

-Realizar una itinerancia de 5 conciertos música clásica de compositores chilenos del siglo XX en voz y piano por las regiones II y XV de nuestro país.

-Otorgar Conciertos de música de cámara para voz y piano gratuitos en las comunas de Parinacota y Arica, de la Región de Arica Parinacota; y en las de San Pedro de Atacama, Antofagasta y Tocopilla; de la Región de Antofagasta.

-Difundir la música clásica desarrollada por compositores chilenos del siglo XX en el norte del país.

-Aportar al desarrollo cultural igualitario de nuestro país a través de funciones gratuitas, tanto en ciudades como en lugares rurales. Lo anterior reforzado con la realización de charlas introductorias acerca de la composición musical y sus autores en cada función.
-Rescatar el legado musical de compositores nacionales del siglo XX.
-Promover la música clásica de cámara en las regiones de Antofagasta y Arica Parinacota de Chile
POÉTICA DE NUEVOS CANTOS PARA MÚSICAS CHILENAS

Considerando las bellas conjunciones que el canto escrito entreveró en la historia musical –canto, poesía, escritura musical y humanismo-, específicamente en Chile, el canto escrito tuvo una resonancia, asimilación, y posterior producción continua, diversa y atenta al fulgurante acontecer poético y literario en particular, y a las vertiginosas transformaciones culturales en general. El influjo temporal en el que se manifestó esta tradición se extendió (con todas las transformaciones que implicaron el advenimiento y sistematización de una nueva actitud compositiva y musical chilena a principios del siglo XX) desde la música de salón de principios del siglo XIX (J. Zapiola, I. Zegers y otros), hasta fines de la década de 1970 (A. Alcalde, A.Guarello, C. Cordero entre otros), en cuyo nocturno periodo dicho canto, si bien resistió valientemente desde su trinchera de música, escritura y vida, finalmente se vio progresivamente sobrepasado por el espacio asfixiante de las circunstancias, las que acabaron por ocultar, y dispersar su fuerza telúrica en la maraña de la censura y el oscurantismo cultural, y, una década después, en los sensuales tentáculos del postmodernismo. Consideramos también que el canto escrito como un bien cultural inmaterial, al estar íntimamente ligado a una férrea condición identitaria en el campo de la música de tradición escrita en nuestro país, es un transparente y lucido testimonio de un arte que, para el caso, suena al existir y habla al cantar, reinventando y transportando en sí mismo las significaciones culturales de la poesía y la misma música. Teniendo en cuenta las dos consideraciones anteriores urge entonces dar cabal muestra al país de los sedimentos y ecos dejados por el canto escrito, y que mejor que iniciar esta genealogía en nuestra tierra, nuestro espacio mental, emocional y cultural: el norte grande. Pues bien, este proyecto, pretende, además de dar acceso y formar público para la música escrita nacional en la zona norte del país, busca testimoniar los sedimentos aun palpitantes de la genealogía del canto escrito enfatizando sus limites temporales a partir de la fecunda tradición compositiva, interpretativa e institucional iniciada en los años 20 por Pedro Humberto Allende y Domingo Santa Cruz en nuestro país que tantas repercusiones éticas, poéticas y finalmente culturales tuvo, y que hoy, en el amanecer del siglo XXI, nos proponemos reinventar, releyendo su destello histórico desde nuestra conciente actualidad, proyectando su telúrico canto nuevamente al devenir
FUNDAMENTACIÓN
Ante nuestra percepción se presentan las siguientes realidades:
1La distancia geográfica del Norte del país, por la naturaleza que posee la forma de nuestro país crean una situación de aislamiento de la música y las expresiones artísticas que se realizan desde la cuarta región hacia el sur de Chile.
2.Nuestro acercamiento a la cultura nacional y en específico a la música, nos incentiva a dar a conocer el sonido de la música del siglo XX y de la música chilena
3.Nuestro acercamiento a la música nos incentiva a dar a conocer el sonido de la música del siglo XX y de la música nacional
4.En el Norte Grande no existe conocimiento ni conciencia de la música contemporánea chilena, sin embargo existe mucha curiosidad desde varios músicos doctos por conocer las partituras y el sonido de la música contemporánea.
5.En el norte del país diariamente se incrementan las conductas autodestructivas en el colectivo de las personas como lo son el consumo de estupefacientes, entre otras. Con la difusión de este tipo música docta nacional queremos contribuir a las tantas causas existentes que buscan disminuir estos índices que deterioran la calidad de vida de los mismos a través de el aumento del imaginario musical y dando a conocer parte de la identidad musical de chile ahora.
6.La música contemporánea chilena, si bien tiene espacios donde darse a conocer, aún carece de difusión dentro del país en lugares geográficos lejanos y en más espacios educacionales como escuelas y liceos de jovenes de escasos reecursos.
7.La música de cámara nacional se queda en los archivos nacionales de partituras, hay que ejecutarla
8.Es necesario formar un público educado, que valore activamente la pureza del sonido musical, que haga silencio en la audiencia y a la vez esté conciente de lo oye en un recital
9.Es necesario crear una conciencia del transcurso de tendencias de la música docta actual a través de una “genealogía musical”
10.A medida que pasan los años y el postmodernismo se abre más y más espacios, vemos que la música de cámara nacional para voz y piano cada vez es interpretada con menos frecuencia y tiende a ser relegada frente a otras manifestaciones musicales masivas
11.El canto escrito es un bien cultural inmaterial que por sus características esenciales porta la realidad del espacio y el tiempo en donde fue escrito. Por lo tanto es tremendamente valioso acercarlo al público para incrementar la identidad cultural del Norte de Chile actual
12.En Chile existe una tradición en la música escrita iniciada institucionalmente por Pedro Humberto Allende y Domingo Santa Cruz que necesita ser difundida para que sea reconocida por el público de todo el país Es indudable que la distancia geográfica del norte grande de Chile crea una distancia cultural que dificulta el acceso de las corrientes artísticas que se presentan en la zona central y sur del país. En la actualidad de nuestro Norte están abriéndose espacios conciertos y festivales de distintas manifestaciones artísticas que están despertando curiosidad y respuestas efectivas en el público del norte del país. Con respecto a la música en general, cada vez llegan más propuestas de eventos presenciales a los cuales asiste una audiencia relativamente masiva que por unos días cohabitan con la producción musical de los grupos musicales de diversas índoles que existen en las localidades del norte del país. Específicamente, el canto desde tiempos inmemoriales ha registrado, plasmado y comunicado sonoramente los conceptos, los códigos y las fuerzas más intrínsecas que unen al ser humano con su entorno. En estas instancias, como sucede en todas partes del mundo, cada vez que un intérprete musical ejecuta una pieza musical crea en el interior de cada persona de la audiencia una versión distinta del tema, personal, de acuerdo a sus percepciones y al imaginario sonoro que según su formación posea. Con respecto a nosotros, en años de formación musical académica Paulette L’huissier y Alvaro Núñez tomamos contacto con la música contemporánea, la vivimos desde adentro como intérprete y compositor respectivamente; la conocimos y reconocimos sus características en el ejercicio del aprendizaje nuestro en el Instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Chile. En nosotros se transformó en un lenguaje válido común que habita junto a los distintos léxicos que existen con respecto a la música que se escucha hoy en día. Este acercamiento nos creó una perspectiva sonora que nos lleva a buscar a este Sonido Nuevo en nuestros oficios como músicos. Paulette decidió trasladarse a Antofagasta para abrir nuevos horizontes musicales, con la necesidad de abrir nuevos espacios a la ejecución musical en regiones que estén lejos de la capital. Alvaro, por su parte, se queda en la capital incrementando su escritura musical y formando público capaz de captar los conceptos de la música de 1800 en adelante. En esta distancia desde su inicio quedó conversada la posibilidad de ampliar audiencia para la música que se hace hoy. La música contemporánea de la línea docta. Esto es con el afán de seguir en este contacto desde adentro de este lenguaje, envueltos en los idiomas que cada compositor crea en sus obras. Al observar el movimiento cívico y cultural actual del Norte, mencionado anteriormente, hemos visto que prolifera un contacto al público y difusión de las musicales en general. Por su parte, el público se activa más y más en cuanto a las tendencias actuales que existen en distintas manifestaciones musicales. Sin embargo, es un movimiento que está en sus inicios y la música docta contemporánea nacional no está siendo difundida del todo en esta zona. Por otra parte, reparamos que en nuestro norte cada día aumentan más y más los índices de consumo excesivo de estupefacientes de todo género, entre otras conductas que disminuyen la calidad de vida de cada persona y del colectivo. Así mismo, se evidencia que las consecuencias de ambas cada vez son más evidentes y extremas. Ante esta situación expertos de diversas índoles indican que la difusión de la cultura a través de las artes y en nuestro caso específico, la música, contribuyen a crear autoafirmación y conciencia de la identidad personales y colectivas. Tanto para el hecho de prevenirlas como para repararlas. Es por esto que difundiendo cultura a través de nuestros medios de expresión que son el canto docto nacional en cada concierto queremos crear una instancia de goce estético que contribuya de manera transversal con la autoafirmación personal y así ayudar a mermar y/o prevenir a estos conjuntos de circunstancias contingentes. Además a la ciudad de Tocopilla le ha costado mucho desde el terremoto del año pasado volver a plantearse con normalidad y recuperar su vvariado movimiento intelectual y cultural que la caracterizaba. Llevándoles este concierto estamos dando una contribución a esos grandes esfuerzos de recuperarse y reactivarse como un particular icono de la cultura del norte de Chile. Por lo tanto el Fondo Nacional de la Música nos presenta a través del financiamiento a la itinerancia de eventos presenciales, la oportunidad de seguir creciendo en nuestro contacto con la música contemporánea nacional y a la vez es una instancia propicia para dar acceso de la misma a través de los conciertos y las charlas formativas al todo el público existente en la zona norte del país contribuir los objetivos transversales recién mencionados. Además, en el plano netamente artístico-musical, realizar este proyecto nos da la oportunidad de “nadar contra la corriente”, o bien romper con la inercia que vemos que existe con respecto a la música de cámara y contemporánea chilena. Esta inercia se puede describir según nuestra percepción, en que si bien hay creaciones y muestras de obras de esta índole, estas creaciones musicales tienden a quedarse escritas y guardadas en los archivos de música que hay en el país, como si estuvieran durmiendo, silenciosos, inertes, en la espera de ser ejecutados, esperando sonar y transformarse en cientos de versiones en el imaginario sonoro de las personas que los escuchen silenciosas en un concierto. En otras palabras, aprovechándonos de la distancia geográfica y valiéndonos del silencio que nos otorga el árido desierto que abraza la costa norte, es que pensamos en valernos de la intimidad que caracteriza la música de cámara y la inmediatez del canto en cuanto a su mensaje para entregar al público estos conciertos con una serie de charlas educativas con el afán romper con ambas inercias que presentamos anteriormente y formar una audiencia activa que conozca esta música y, así, la pueda valorar. Más en específico, escogimos la región más norte del país con la intención de ampliar el espectro territorial en los que hoy en día se ejecuta música contemporánea chilena en vivo. A su vez es un desafío en nuestro plan de formar audiencia en el mismo concierto con personas de ahí que difícilmetene tiene acceso a las ciudades más cosmopolitas del país. Y por otro lado, escogimos San Pedro de Atacama, la Escuela E-26 ya que es una escuela nueva con un auditorium recien construido, para igualar esfuerzos entre la nueva edificación y nuestros esfuerzos de producción musical. será un honor para ambos, colaborando entre la educación y el rescate de este tipo de música a través de su ejecución frente al público. Gracias a la guía de Juan Pablo Jacob, nuestro productor, queremos mostrar nuestro recital a lugares como lo son Arica,
NUEVOS CANTOS PARA MÚSICAS CHILENAS: NORTE DE CHILE REPERTORIO 1
. Alfonso Letelier: Canciones antiguas para voz y piano: • Canción I: Texto tradicional gallego-portugués de una canción de “alba” o “amigo” • Canción II: Texto tradicional español de la canción “Enemiga le soy, madre” • Canción III: Texto tradicional español dee la canción “Míos fueron, mi corazón, los vuestros ojos”
2. Álvaro Núñez: Solaz para voz sola
3. Eduardo Cáceres: El viento en la Isla. Texto Pablo Neruda
4. Ida Vivado: 10.1 Tránsito y permanencia 10.2 Luz
5. Sergio Ortega: Cuatro Canciones del capitán
6. Juan Amenabar: I Hill pray. Texto Rosa Cruchaga
7. Alejandro Guarello:
7.1 Romance de la luna luna. Texto Federico García Lorca
7.2 Reyerta. Texto Federico García Lorca
8. Andrés Alcalde: El Agua Texto Gabriela Mistral
9. Gustavo Becerra: 3.1 Entrada a la madera. 3.2 agua dormida
10. Eduardo Maturana: Tres canciones para Soprano (1965/1970)
11. Pedro Humberto Allende: Mientras baja la nieve (Texto: Gabriela Mistfral), para voz y piano 12. Fernando García: 5.1 El Aconcagua 5.2 El Hambre* (5) de “Bestiario” (Texto de Nicolás Guillén) , San Pedro de Atacama y Tocopilla en que, según la experiencia de otros colectivos artísticos, el público ha entregado una respuesta valedera frente a sus propuestas escénicas.
Mientras que en Antofagasta, queremos llevar nuestro recital a la Escuela Profesor Elmo Funes, porque es una escuela que por sus características educa artísticamente a una gran población de escasos recursos. La forma que queremos darle al programa del recital se basa en una genealogía musical de algunos compositores nacionales. Ya que quienes estamos en este proyecto, nos formamos en distintos lugares de Chile pero el norte nos une geográfica y/o conceptualmente en estos momentos.
Durante nuestra formación conocimos intensamente la intima historia musical chilena, el fundamento de nuestro presente (en el canto, en el piano y en la composición). A partir de esas experiencias y de lo que mencionamos anteriormente, nace este proyecto, el cual se fundamenta en la necesidad de desarrollar una genealogía intima de los movimientos, refracciones, y reinvenciones de la historia musical chilena de tradición escrita en los últimos 80 años, a través de la estela dejada por un antiguo rito forjado antaño en el romanticismo: la composición e interpretación de música para voz y piano: para nosotros, canto escrito.